Hoy, más que nunca, la sociedad exige el comportamiento ético en todos los ámbitos: el científico, el de la ecología, el mundo de la empresa…también en el personal, como un modo de reivindicar nuestra humanidad. Precisamente, por ser inherente a nuestra naturaleza humana, la ética trata de cuestiones efectivamente fundamentales, universales, que no pasan de moda.
Robert Spaemann
Estudió filosofía, historia, teología y lenguas romances en las universidades de Münster, Munich, Friburgo y París. Doctor en filosofía en la Universidad de Münster. Se dedicó principalmente a defender la noción teleológica de la naturaleza conforme al aristotelismo, y asimismo la relevancia de la misma en el estudio de la antropología filosófica, la ética y la política. Como moralista, Spaemann fue uno de los defensores europeos más importantes de la vida de los niños por nacer. Como pensador político, Spaemann fue un agudo crítico del utopismo marxista, en una época en que la mayoría de la academia filosófica alemana estaba influenciada por el marxismo. Católico profundamente devoto que empleó su inteligencia brillante para defender la Fe más que para explicarla.